Existe una gran variedad de procesos de impresión, pero la impresión digital continúa extendiéndose, según confirman los datos del V Informe de Drupa sobre Tendencias Internacionales (5th Drupa Global Trends Report). Este estudio, realizado en noviembre de 2017 a casi un millar de encuestados, profundiza en los avances económicos clave y en el desarrollo de la industria gráfica global en cuatro sectores: comercial, editorial, envases y funcional. En relación con ello, el informe destaca que “la mayor parte de imprentas funcionales ya son digitales, y el 60% afirma que la impresión digital representa más del 50% de la facturación. El 42% de los impresores comerciales indican que más del 25% de la facturación corresponde a impresión digital, el 21% en el caso de los impresores editoriales, mientras que en el área del packaging (envases) el porcentaje se reduce al 12%.
El estudio, según Drupa, refleja la recuperación económica mundial, lenta pero constante, desde la recesión de 2008, y la creciente confianza que muestran muchos impresores sobre cómo pueden explotar mejor la innovación tecnológica y la integración de las comunicaciones digitales. La impresión digital prosigue aumentando, pese a la variedad de los procesos de impresión, que incluyen desde catálogos o flyers a revistas y otros productos. En este sentido, las mismas fuentes indican que el 65% de los encuestados usan offset a hojas en sus plantas, el 47 % impresión digital en color de hojas sueltas mediante tóner, el 29% impresión digital monocroma de hojas, el 24% inyección de tinta digital de gran formato (hojas y bobinas) y el 20% recurre a la flexografía. En cuanto al crecimiento en volumen, la impresión digital mediante tóner a hojas en color obtiene un saldo neto positivo del 23%, el gran formato un 12% y la flexografía y el offset a hojas un 10%.
Impresión convencional versus impresión digital
En el caso de la impresión convencional, es decir, la no digital, las longitudes de tirada y los plazos de entrega se acortan año tras año, mientras que el número de trabajos aumenta. El patrón es el mismo para la impresión digital, pero con una excepción importante: las longitudes de tirada aumentan. La proporción de la facturación total atribuible a la impresión digital aumenta lentamente. Así, en 2013 un 23% del panel indicaba que más del 25% de la facturación fue digital, mientras que en 2017 la cifra alcanzó el 30%.
A pesar de la atención prestada al comercio electrónico en términos generales, solo el 27% de todos los impresores del panel utiliza una instalación web-to-print o tienda online, apenas un 2% más que en 2014. Para los impresores funcionales supone una fuente de pedidos importante, pero no tanto para los demás sectores, teniendo un impacto mínimo en el caso de la impresión de envases.
Oferta de impresión digital
En cuanto a la impresión digital, el número de impresores que la ofrece sigue aumentando a escala internacional, del 24% en 2013 al 35% en 2017. El 18% de los impresores de etiquetas indica que más del 10% de los encargos son digitales, al igual que el 1 % de los impresores de cartón y el 13% de los impresores de materiales flexibles.
Por otro lado, hay poco crecimiento en los encargos de valor añadido (por ejemplo, datos variables), con una ganancia típica de apenas un 2% más de impresores que registran un impacto adicional en cinco años. La muestra de impresores funcionales se ha diversificado en la impresión funcional procedente de otros sectores de mercado, y todavía registran una proporción importante de la facturación en otros mercados. En los mercados funcionales, la inyección de tinta digital se ha convertido en el proceso dominante (el 65% lo usa) mientras que la serigrafía ha retrocedido (hasta el 24%).
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